Por: Adrián Anacleto
La voluntad de automatizar tareas repetitivas, aburridas y que además tengan una fuerte inclinación a que se cometieran errores humanos durante su ejecución no es una novedad. Inició con los primeros sensores capaces de determinar la temperatura de un ambiente a fines de la década del ’60. Treinta años después se consolidó el universo BPM (business process modeling): un conjunto de herramientas que permitían modelar, optimizar y automatizar algunos procesos de negocios a partir de la estructuración de normas, comportamientos y estándares de la empresa. Así, creaba un flujo de trabajo ordenado para integrar usuarios, sistemas y datos.
El concepto de RPA (robotic process automation, automatización robotizada de procesos) podría entenderse como la evolución natural de BPM: permite replicar al 100% las actividades diarias repetitivas de punta a punta. Su aplicación es ideal para suplir algunos típicos puntos de dolor en las empresas: procesos administrativos, de cobros y de pagos, de conciliación, de carga de facturas o tickets… RPA aprende y ejecuta tareas administrativas y es capaz de seguir una secuencia de pasos, de ser entrenada y de interactuar con sistemas externos para intercambiar información. Sin embargo, a diferencia de la inteligencia artificial, no toma decisiones en base a la lógica del negocio.
Tampoco genera cambios en la infraestructura tecnológica subyacente: puede trabajar con cualquier plataforma que le pongan delante, tal como un humano lo haría.
Por lo tanto, todo aquello que históricamente consumió ingentes cantidades de tiempo hoy se puede derivar a un software capaz de, entre otras funciones, combinar dos planillas de cálculo, obtener datos externos de un sitio web, verificar la validez de una factura, cargar los datos en el ERP o en algún otro sistema que se le indique o preparar los informes. Las capacidades robóticas de la herramienta están dadas desde la capacidad de reconocer ópticamente caracteres en cualquier documento, incluso los escritos a mano, hasta escuchar llamadas de voz e interpretar su contenido, diferenciando acentos y modismos.
Una empresa que necesita procesar diez millones de tickets diarios para producir un único asiento contable encuentra en RPA el aliado perfecto para hacer crecer exponencialmente el potencial de su capital humano. El robot se aboca las 24 horas del día y los siete días de la semana a resolver las actividades repetitivas mientras las personas que se dedicaban antes a eso pueden transformarse en agentes de generación de valor y ocuparse de actividades que van desde detección de fraudes hasta análisis de desempeño del proceso de ventas, pasando por una infinidad de posibilidades de acuerdo a las necesidades específicas del negocio.
La adopción de RPA implica una revolución en la forma de trabajar, de ejecutar los procesos y de producir resultados: las empresas que decidan explorar las posibilidades de esta tecnología necesitan atravesar primero un cambio cultural, con un fuerte apoyo de change management.
La tecnología no se detiene: la facilidad de integración con machine learning nos permite predecir una próxima generación de RPA con mayor inteligencia, capaz de tomar decisiones sencillas ante disyuntivas o situaciones condicionales. Además, a medida que la tecnología madura son cada vez más los modelos preconstruidos que permiten abarcar los procesos más diversos, por lo que su implementación y puesta en marcha tenderá a ser cada vez más sencilla, por lo que se espera su despliegue a gran escala corporativa en el próximo lustro. Así como hoy existen repositorios de datos o de documentos, es esperable que en breve existan repositorios de bots que cubran todas las necesidades de activar procesos repetitivos que tenga la empresa en general o cualquiera de sus empleados en particular.
RPA es una solución que no puede faltar en las empresas inteligentes, es decir, aquellas que dedican la totalidad de sus recursos a actividades de valor agregado y hacer crecer sus negocios. La mejor manera de empezar este proceso de transformación es bien acompañado. Esperamos tu contacto en info@epidata.net para empezar, juntos, a descubrir los beneficios que RPA puede aportar a tu empresa.